Realidad aumentada en cirugía de columna: una revisión narrativa de la precisión clínica, la eficiencia del flujo de trabajo y las barreras para su adopción

30/10/2025

Artículo original: Nadeem-Tariq A, Kazemeini S, Kaur P, et al. Augmented Reality in Spine Surgery: A Narrative Review of Clinical Accuracy, Workflow Efficiency, and Barriers to Adoption para su adopción. Cureus. 2025;17(6):e86803.

DOI: https://doi.org/10.7759/cureus.86803

Palabras clave: augmented reality, orthopedics, spine surgery, virtual reality, virtual reality simulation.

Abreviaturas y acrónimos utilizados: RA (realidad aumentada), HMD (head-mounted display), TC (tomografía computarizada).

Línea editorial del número: En el número de este mes, se presenta un artículo muy interesante relacionado con la innovación tecnológica en cirugía guiada por imagen. 

Motivo para la selección: He elegido este artículo porque aborda el uso de la realidad aumentada en cirugía de columna, una técnica en pleno crecimiento y desarrollo que busca mejorar la precisión quirúrgica y reducir la exposición a la radiación. Considero que representa una mirada hacia el futuro de la técnica quirúrgica y un cambio importante en el papel de los Técnicos en Imagen, quienes cada vez tendrán una participación más activa en la integración de estas nuevas tecnologías dentro del entorno quirúrgico.

Resumen: La realidad aumentada (RA) se ha consolidado como una herramienta innovadora dentro del ámbito de la cirugía ortopédica, especialmente en los procedimientos de columna vertebral que requieren una alta precisión espacial. Su aplicación permite superponer información tridimensional del paciente en tiempo real directamente sobre el campo quirúrgico, facilitando la orientación anatómica y mejorando la exactitud en la colocación de tornillos pediculares.

Los autores realizaron una revisión narrativa exhaustiva de estudios publicados entre 2004 y 2025, evaluando la eficacia, seguridad y eficiencia del uso de RA en la cirugía de columna. Los resultados indican tasas de precisión entre el 93 % y el 100 %, una reducción significativa del tiempo operatorio y una disminución de la exposición a la radiación, tanto para el paciente como para el personal quirúrgico. Además, la RA mejora la ergonomía y disminuye la carga cognitiva del cirujano al integrar la información visual en su campo de visión natural.

Asimismo, la revisión aborda su utilidad en la formación quirúrgica y en la planificación preoperatoria, destacando que la RA puede servir como un complemento valioso a las técnicas tradicionales de navegación y fluoroscopia. No obstante, se señalan limitaciones relevantes, como el coste de implementación, la necesidad de protocolos de entrenamiento estandarizados, la curva de aprendizaje y la escasez de ensayos multicéntricos que evalúen resultados a largo plazo.

En conjunto, el artículo concluye que la realidad aumentada representa una tecnología prometedora que puede optimizar el flujo de trabajo quirúrgico, aumentar la precisión intraoperatoria y mejorar los resultados clínicos en la cirugía de columna. Sin embargo, su adopción generalizada requerirá validación científica sólida y un enfoque colaborativo entre cirujanos, ingenieros y gestores sanitarios para superar las barreras técnicas y económicas existentes.

Valoración personal: El artículo presenta una revisión clara y bien estructurada sobre el papel de la realidad aumentada (RA) en la cirugía de columna. Resume de manera eficaz los avances tecnológicos y los beneficios potenciales de esta herramienta, como la mejora en la precisión quirúrgica, la reducción del tiempo operatorio y la menor exposición a la radiación.

Entre sus aspectos más destacados se encuentra el análisis comparativo entre distintos sistemas de RA y las técnicas tradicionales de navegación, así como la referencia a su aplicación en la formación quirúrgica y la planificación preoperatoria. El texto ofrece una visión equilibrada entre las ventajas y las limitaciones actuales, incluyendo la necesidad de estandarizar la formación, validar los resultados mediante estudios multicéntricos y considerar los costes asociados a su implementación.

En conjunto, la revisión proporciona una actualización completa sobre una tecnología emergente con un impacto cada vez mayor en la práctica quirúrgica. La RA se perfila como una herramienta útil para optimizar el flujo de trabajo en quirófano, mejorar la precisión intraoperatoria y aumentar la seguridad del paciente, especialmente en procedimientos complejos o mínimamente invasivos.

 

Andrea Marín Ramírez 

TSIDMN, Hospital General Universitario Gregorio Marañón. 

andrea.marin@salud.madrid.org      

https://orcid.org/0009-0002-5039-8849